El Programa de Lenguas de la Universidad Nacional de San Martín nació en 2002 con una propuesta que incluía la enseñanza de inglés y portugués. Con el correr de los años, se fueron incorporando otros idiomas. Actualmente, se ofrecen cursos y talleres de las siguientes lenguas:
El Programa de Lenguas acerca el aprendizaje de las lenguas extranjeras y originarias a la comunidad. En tal sentido, se articulan, por un lado, los saberes teóricos, la psicología del aprendizaje y la didáctica y, por el otro, las necesidades de los estudiantes, sus saberes experienciales y su conocimiento sobre la lengua y cultura materna.
Mediante el contacto con otras manifestaciones culturales, promovemos una visión del mundo en su diversidad y el acercamiento a la cultura extranjera, además de una nueva mirada de la propia cultura desde el respeto y la valoración de las diferencias, sin establecer jerarquías, estereotipos ni prejuicios.
La propuesta del Programa de Lenguas constituye una unidad institucional en la oferta de lenguas extranjeras y originarias. Atendiendo a los intereses y a las motivaciones de los estudiantes, se asegura la evaluación permanente de la tarea educativa, la reflexión, el análisis continuo de las necesidades de la comunidad, la calidad académica y la capacitación constante.
En este sentido, los objetivos del Programa de Lenguas quedan definidos en las siguientes líneas:
La metodología del Programa de Lenguas se basa en la enseñanza de las cuatro macrohabilidades de la lengua simultáneamente: el habla, la lectocomprensión, la escucha y la escritura. Identificamos el desafío de aprendizaje de cada forma lingüística y enfatizamos el enfoque comunicativo a través de ejes temáticos.
Los contenidos de todas las lenguas que forman el Programa parten de un mismo eje, en el que se desarrollan y comparten herramientas, métodos y materiales de enseñanza, para lograr un enfoque común.
Al mismo tiempo, reconocemos las tensiones propias de los diversos marcos teóricos y respetamos las prácticas discursivas de cada una de ellas. Así, se fomenta el aprendizaje de las diferentes culturas subyacentes en cada una, a la vez que se analiza la propia cultura materna.
El abordaje intercultural se hace a través de las manifestaciones artísticas, literarias (con textos auténticos) y culturales en general de la lengua. Este acercamiento entre las lenguas y culturas extranjeras y originarias, por un lado, y la lengua y cultura materna, por el otro, favorece la desarticulación del comportamiento etnocéntrico y ayuda a revalorizar la propia identidad tomando conciencia de la identidad de los otros.